Importancia del diagnóstico para las personas con alto potencial
Ser una persona superdotada es tener diferentes funciones cerebrales.
Estas diferencias están relacionadas con varios factores:
Híper-emotividad:
Por ejemplo, el alto potencial en algunos niños causa ira impulsiva, mucha empatía, dificultad para la gestión de las emociones y la capacidad de vivir los momentos positivos intensamente.
Tales reacciones exageradas pueden parecer extrañas a las personas que no tienen alto potencial.
Híper-sensibilidad
Sufre porque hay demasiado ruido, les pide a sus colegas hablar bajo porque no pueden concentrarse. Se deslumbra por el exceso de luz y pide que apaguen las luces de neón, etc.
Los cinco sentidos de los que HP puede causar un dolor que no se entiende por otros.
Imaginación llena:
Tener ideas innovadoras que pueden asombrar y que otros no pueden percibimos o aceptar. El dotado a menudo es mal entendido y a veces no se les toma en serio.
Sobre-excitabilidad intelectual
El cerebro produce un pensamiento continuo muy personal, a menudo mal entendido por los demás. Sienten una terrible preocupación por la justicia, una necesidad de entender todo, curiosidad insaciable, etc.
Cuando una persona promedio se comunica con una de alto potencial, la comprensión suele ser difícil, casi se podría decir que son dos monólogos paralelos.
Necesidad de moverse, ser activo
Algunos HP puede pasar por un tiempo sin hacer nada. Sin embargo, su naturaleza es ser activos.
La persona de gran potencial siente una brecha profunda desde que es pequeño. En el jardín de infantes y la primaria se siente diferente.
Mientras que una persona normal se pregunta: ¿que hice mal?, un HP se pregunta: ¿qué debería haber hecho?
Esta brecha a menudo conduce a la incomodidad, la persona no se siente comprendida.
Un buen diagnóstico es importante:
A menudo encontramos que durante el momento del diagnóstico, las cualidades de la persona HP ya está en marcha. Se podría decir que hay un antes y un después para los niños y para los adultos. El diagnóstico comienza con un historial médico de citas donde la persona habla de su vida.
Este primer encuentro es muy importante ya que es parte del diagnóstico. El segundo encuentro será una evaluación cualitativa, donde se miden las cinco características principales de alto potencial.
Luego viene la prueba de coeficiente intelectual. Esta puede ser un obstáculo más difícil pero es esencial para ayudar a la persona a recuperar la confianza. Esta prueba no determina por completo que una persona sea superdotada pero le puede ayudar a la persona para darse cuenta de la inteligencia que posee. Por ello, es necesario pasar un test de inteligencia para no quedarse con las cuestiones pendientes.
Cuando damos un diagnóstico de alto potencial, la gente pregunta: «Y ahora, ¿qué hago?” “Nosotros siempre recomendamos a la gente a tomar un mínimo de un mes para aceptar este diagnóstico, para leer y aprender lo más posible sobre el alto potencial. Si después de ese mes tiene necesidad de aprender más pueden ponerse en contacto con nosotros”.
“Nuestro deseo más profundo es que la gente pueda aprender lo mayor posible sin nosotros”. El HP no es una condición desfavorable y la mayoría de las veces nosotros tenemos la capacidad suficiente para vivir felices.
Y cuando es: no
A veces, por supuesto, hay personas que no son HP y sufren después de una evaluación. Ellos han puesto sus esperanzas en esto, pensando que sería la solución a todos sus males. Nuestro trabajo es tan difícil, pero igualmente importante. Tenemos que ayudar a estas personas a aceptar que su sufrimiento no está relacionado con un alto potencial. A continuación, se hace una reorientación para dar un diagnóstico y terapia apropiada a esa persona.
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